La persecución política y judicial en latinoamérica es brutal y continúa sin tregua alguna, tras la condena a seis años de prisión e inhabilitación perpetua para ocupar cargos públicos por el supuesto delito de administración fraudulenta a Cristina Fernández de Kirchner, actual vicepresidenta de Argentina.
El delito que supuestamente habría cometido Cristina rondaría los 400 millones de dólares en obras viales efectuadas desde el 2003 al 2015.
Después de conocer la sentencia, La vicepresidenta se pronunció este viernes tras recibir el Doctorado Honoris Causa de la Universidad Nacional de Río Negro. Cristina dijo que "Los 'fundamentos' de ayer fueron millones de palabras y de adjetivos, ninguna prueba y un solo objetivo: la proscripción. A 40 años de Democracia, lo que estamos viendo es a la oposición aliada al Partido Judicial, no hay Estado de Derecho".
Los abogados defensores de Fernández de Kirchner, ahora deberán iniciar formalmente su apelación.